viernes, 10 de marzo de 2017

JUNIO 16b. - Miércoles 12, 1:17 pm



Autovia 7, paradero YPF, miércoles  12,  1:17 pm


Con el dedo índice, "la chica de la Estación YPF", estaba recostada en una vieja rueda  de tractor y le señaló a Nikita Artemiev    que saliera del Chevy amarillo y se acercara.

¿Qué  vio Nikita  Artemiev?



¡Joder, macho! El culo de Nik despedía chispas y tiraba pedos tan ruidosos como los truenos sobre su cabeza.

Encendió el motor y salió marcha atrás con el pie en el acelerador por un angosto corredor entre las pilas de autos para desguace, algunos robados robados.

3.
Estacionó al costado de la estación de Servicio.  Bajó del Chevy  como si hubiese pasado por la sesión de quimio: estaba exhausto y tenía la impresión que se desmoronaba en pedazos, le dolía la cabeza, los músculos, sentía nauseas y quería cagar: se iba la mierda  al calzoncillo.

Caminó a los tumbos hasta el baño.¡Mala suerte cabrón! El baño estaba con agua sucia, mierda flotando en el piso.  La gente meaba y cagaba desde la puerta. ¿Limpiarse el culo? Eso si que era una operación complicada, capullo.   

Artemiev se olvidó de todo y se desahogó  con gritos, patadas y puteadas. Los baños públicos del país eran de terror escatológico: nunca, en ningún lado, jamás se encontró un baño limpio, cuidado y habilitado para su uso de modo civilizado.

Nik  carecía de nervios de acero:  cero  en  paciencia. Era un tipo  recargado de bronca animal. Eso sí; imprudente, señor.

Agachado en el marco de la puerta, hizo fuerza y sintió caer dos soretes  mientras leía  un trozo de diario para limpiarse el culo. 

"(...) comunidad, que permite a los estudiantes ampliar su horizonte de aprendizaje y comprometerse en la transformación de la comunidad junto con otros actores sociales, la difusión de una cultura participativa, solidaria y de compromiso  ciudadano y el reconocimiento de la labor de los docentes que trabajan de una manera distintiva comprometiéndose con la implementación de una pedagogía solidaria que tiende al mejoramiento de la calidad y la inclusión educativa, con la prioridad a la transformación social y a estudiantes cuya trayectoria educativa, se orienta a una ciudadanía comprometida desde la calidad (...) 

Nik tenía las piernas acalambradas, se limpió el culo con las palabras de molde del diario de la Provincia y se preguntó si a los funcionarios les pagaban por "palabras" para hablar o escribir, en lo posible, lindo y que no se entienda un carajo: a más largo el artículo o el discurso,  cobraba según tarifario oficial . 

Nikita salió puteando y se fue a  una pileta que tenía canilla y ¡Milagro! Había agua. Metió la cabeza bajo el chorro frío y un tipo vestido de playero le dijo de atrás: "Maestro esta pileta es para el personal" Artemiev se dio  vuelta con la cara chorreando   "Por qué no te vas a la remil puta madre que re remil parió" 

"El hombre venía cargado, pendejo"


Estuvieron a punto de agarrarse a trompadas,   pero Dante venía corriendo y evitó la riña.

Nik fue empujado y de lejos vio  a los botijas de la policía. Se contaban, uno al otro, como vivieron cada uno de su lado, el garche con "La chica de la Estación YPF" . Estaban complacidos, satisfechos, contentos y  los  doblaba la risa.

Eran las 2:15 pm. Nikita Artemiev y Dante caminaron  al Quincho de la Parrilla sin hablar . Comieron así nomas choripan  con agua mineral y un vino de la casa  avinagrado para Nik, que no iba a manejar.

Artemiev  vivía el viaje como un parto de culo. Estaba chivado por esto o por aquello y por todo.

--- ¿Chorizo? La concha de tu madre, Dante ¿Nada más que chorizo? -- protestó.
--- Ruso, tengo que llegar a Villa del Parque a las 4 ¿Entendés? Después comemos a la noche: langosta, vieyras, bife de chorizo con papa fritas y ensalada mixta.
--- Pero boludo, estamos  paseando.
--- Vos paseas Ruso, yo trabajo boludo ¿O te olvidaste?

Fin de la historia: Dante estaba apurado para llegar a Villa del Parque y Nik, con el el chorizo atravesado, lo seguía  al Chevy amarillo, eructando el vino de la casa.


4.
Se toparon con tres Micros envueltos en gigantescas banderas  con  hinchas de fútbol,  cantando a gritos pelados.

Nik y Dante se corrieron a  la vera del camino.
“En una tarde te fuiste al descenso,  
sos cagón igual que San Lorenzo. 
Llamás al cura, hacen la misa, 
y a los del rojo nos chupa la pija” 

El canto de los hinchas era reiterativo, sin continuidad y estaban tan enardecidos que tenían el torso desnudo y revoleaban la camiseta roja de Independiente a pesar del frío polar. Algunos exhibían revólveres de puño que disparaban al aire y los casquillos rebotaban en  el asfalto. El orden de los Barras era: a más  quilombo, menos chances tenía la cana de intervenir: eran todos cagones y nadie quería meterse.
“En Avellaneda hay una banda,
 la más loca de argentina, 
la que fuma marihuana 
y la que toma cocaína”
                                                                 
Nikita tenía pánico a tanta gente apretujada, saltando con los torsos desnudos y tatuados, gritando y disparando revólveres con balas de plomo.  

El miedo de Artemiev lo empujaba a meter la cabeza en el Chevy amarillo, como si esas latas fuesen  un casco blindado.

Pero para Dante, era un fiesta: saltaba, gritaba y hacía coro con  los Hooligans.

Hubo más tiros de la barra y  los milicos miraban y se reían.

“Y dale dale dale Ro, 
ponga huevo Independiente, 
ponga huevo y vaya al frente 
que tenemos que ganar 
y que nos chupen bien los huevo" 
Nikita gritó.
--- Salgamos para Villa del Parque, boludo.
--- Espera boludo  ¡Está buenisimo!
--- La concha de tu hermana, estos hijos de puta nos van a matar.
--- Tranquilo ruso, no hay nada mas saludable que la adrenalina en la pelea callejera. Salí del auto cagón.

Artemiev  le gritó.
--- Nos espera Villa del Parque, boludo.

Hubo un griterío de la puta desde un  grupo de tifosi que, habían echo un claro círculo para el desafío vaya mierda a saber por qué. Los simios saltaban en derredor, hasta se movían como una rueda girando con la energía de los gritos y los brazos agitados y los puños despeinando cabezas. 

Mierda ¡Lo que  duró ese quilombo! 

Cuando se abrió el grupo, hubo abrazos y gritos de perros rabiosos

Dante se abrió paso saltando con el pueblo futbolista. Daba palmadas en la espalda y recibía besos en la mejilla y se daban abrazos carnales.


5.
Dante se metió en el Chevy. Nik se corrió puteando contra la puerta, cruzó los brazos preparado para dormir. Dante salió lentamente a la AU7 y disminuyó la velocidad antes de llegar al reten de la Policía Provincial.

Los dos canas  que había visto Nik entre las ruedas de tractores con "la chica de la estación YPF", estaban al costado de la ruta conversando. Tenían de fondo la casilla y el mástil de la  bandera. Había un patrullero y una camioneta. Nikita, sin pensar, les sacó un par de fotos y vídeo con el celular.

 Dante se  enojó.
--- ¿Qué haces pelotudo?¡Quardá eso!


Disminuyó la velocidad antes de llegar al reten de la Policía Provincial.  pero la yuta estaba en otra cosa y los apuraron para seguir. 

Alejados cincuenta metros, Dante voló a Villa del Parque en el Chevy amarillo bajo la lluvia por la AU7 al norte.



La angustia: ¿Qué mierda vio Nikita Artemiev para salir espantado de la escena de la escena que acababa de ver: dos pendejos cogiendose a "La chica de la Estación YPF"

1. 

2.
3.
El culo de Nik despedía chispas y tiraba pedos tan ruidosos como los truenos sobre su cabeza.


FIN

JUNIO  16


"Los hechos y/o personajes de "JUNIO" son ficticios. 

Cualquier similitud con la realidad 
es pura coincidencia."



Seguimos  en  Curso


Nikita Artemiev & Dante en "Villa del Parque" 
¿Qué van a hacer allí?  

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El frío y el silencio le fue comiendo el hígado y Nik entró en un   estado de coma, cabeceó un par de veces hasta que se mordió la lengua y abrió los ojos: “la puta madre” gritó en su cubículo y  vio a un viejo, seco en carne, andrajoso y pintado de barro, pegado al Chevy amarillo. 
El viejo golpeaba frenéticamente la ventanilla,  gritaba y los perros ladraban “¿Qué mierda dice?”, dijo   asustado.



  

Nik maniobraba entre las cargas que llevaban  la barra brava del sindicato de  conductores brasileños, bolivianos, paraguayos. Uruguayos… Nikita se agarraba fuerte del volante, porque todos  los hijos de puta lo  pasaban, provocaban una explosión que tiraba al Chevy amarillo  a la banquina. También tenía que cuidarse de los sedan: todos nuevos. Cortaban el aire como en una pista del autodromo. A decir verdad, Nik traspiraba dentro de ese torbellino de hierros, bocinazos, luces pidiendo paso, motores a full y a todos les veía el trasero humeante de los caños de escape tirando pedos y cagando aceite.Nik estaba nervioso.

--- Tengan cuidado, che – gritaba.



Puede interesarte la  secuencia de hechos  en el Centro Distribuidor, Parador, Retén de la Policia, Control de la Gendarmeria y Estación de Servicio YPF + Desarmadero.
(...) Detrás del parabrisas, escondido el cuerpo y la cabeza, Nik miraba con un ojo, cómo   dos pibes y una chica cogian entre las ruedas de tractores gastados en la estación YPF.  La piba tenía entre sus manos la pija de uno de los pendejo “Hijo de puta” dijo Nik mirando la larga y gruesa manguera   en la boca de la mina y en rápidos movimientos arriba-abajo daba cuenta de su predisposición a coger y ser cogida a como venga. Con ganas movía el culo sobre la cabeza de la modesta verga del segundo. El trío y Nik, escondido en el Chevy, se pajeaba y todos hervían en la olla popular.



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DE LOS PRIMEROS 10 RELATOS COMPLETOS
 de "JUNIO"




Si te interesa los relatos de la obra anterior del autor







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